¿Has pensado cuál es la parte de tu casa a la que menos atención prestas? Piénsalo bien. ¿Cuál es ese lugar que sólo miras como mucho durante un par de segundos por la noche? ¿No se te ocurre? En muchas ocasiones las cosas más importantes son a las que menos caso hacemos.
Muchas personas no lo tienen y por esa razón andan por la vida pasándolo francamente mal.
Bien, como la reflexión de hoy no es una adivinanza os lo voy a decir. Se trata del Techo.. Hoy queremos dedicar nuestra reflexión a pensar un poquito en todas esas personas que por las razones que sea se han quedado sin nada en la vida. Hay veces que el alcohol, el juego o los problemas personales han provocado una cadena de sucesos que han conseguido como resultado que alguien se quede en la calle.
Por las calles de nuestras ciudades hay mucha gente que vive sin hogar. Algo parecido que pasa en ciudades como Alicante, Valencia o Barcelona. El buen clima de estas urbes favorece que haya más gente instalada en sus adoquines que en los de ciudades como Ávila o Burgos, donde tanto frío hace. La gente que vive en estas condiciones es gente exactamente igual a nosotros, excepto que las cosas un día se le complicaron un poco más. Pero ellos sienten como nosotros y tienen preocupaciones con nosotros. En ocasiones pasamos por su lado demasiado rápido sin darnos cuenta de que están, de que son personas como nosotros. Un saludo, una sonrisa o unas palabras hacia ellos haría que se sintieran menos solos.
Ya sabes, cuando esta noche te metas en la cama mira al techo, sí. Mira al techo y detente unos segundos, y piensa lo importante que es ese trozo de escayola blanco, gris o amarillo. Da gracias a Dios y a la vida por tenerlo y piensa que muchos sueñan cada día con uno parecido mientras miran a las estrellas. Qué tengáis un buen día.
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