ESTA CUARTA SEMANA DE CUARESMA QUEREMOS REFORZAR EL VALOR Y EL COMPROMISO DEL ACOMPAÑAMIENTO.
El que anda solo, sin referencia a otros hermanos, corre el peligro de perder la orientación y de gastar el tiempo en un darse vueltas a sí mismo, como ocurre a veces en caminos de montaña cuando la niebla borra el horizonte más próximo.
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