En esta reflexión queremos dar a las palabras y a la comunicación el valor que se merecen.
Las palabras tienen un valor muy importante en nuestra vida. Pero debemos ir con cuidado, pues con nuestras palabras podemos herir a las personas que nos rodean. En cambio, con palabras bonitas podemos hacer muy felices a los demás. Podemos invitar a los alumnos de decirse palabras bonitas entre ellos, e incluso a anotar, en el tablón de la clase, palabras bonitas que vayan surgiendo.
- ¿Qué ocurre en el país del cuento?
- ¿Es fácil encontrar palabras bonitas?
- ¿Qué hay que hacer para encontrarlas?
- ¿Por qué Óscar tiene palabras bonitas?
- ¿Qué palabras tiene Diego?
- ¿Consigue con sus palabras que Aura le quiera?
- Y nosotros, que no hace falta que compremos las palabras, ¿Solemos decir palabras bonitas a los demás?
- ¿Qué cosas hemos conseguido diciendo palabras bonitas?
ORACIÓN
Jesús,
quiero escuchar tu voz
y seguir tus enseñanzas.
Quiero conocer tu vida, tus palabras,
tus gestos de amor verdadero.
Quiero prestar mucha atención
a tus mensajes de los Evangelios.
Quiero aprender a vivir como discípulo
y seguir tus pasos.
Abre mi corazón,
mis oídos y mi inteligencia,
para que pueda recibir tu mensaje
y cambiar mi vida.
Quiero escuchar tu voz
para vivir cada día
más cerca de Dios.
¡Que así sea, Señor!
SAN PEDRO POVEDA, RUEGA POR NOSOTROS.
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