Dios perdona siempre porque siempre es bueno; los hombres sin embargo nos cuesta algo más saber perdonar.
José Luis y Enrique están jugando al balón. José Luis, sin querer, le da una patada a Enrique y éste rueda por el suelo. Detuvo el balón y fue a ayudarle a levantarse; pero al alargarle la mano, Enrique le dio un empujón y lo tiró por el suelo, y se negó́ a continuar jugando y a juntarse más con José Luis. Además, al día siguiente, Enrique llamó a sus amigos y los puso en contra de José́ Luis; éste ahora tiene que pasar todos los recreos solo.
En cuaresma todos los niños tenemos que saber perdonar. FELIZ DÍA.
¿Qué nos parece la actitud de Enrique?
¿Hemos vivido alguna experiencia parecida?
¿Nos cuesta perdonar?
Amigo Jesús, hoy queremos darte gracias porque nos has regalado el perdón.
Que aprendamos a perdonar, incluso en las situaciones que no es fácil.
Si logramos hacerlo, estaremos construyendo un mundo donde todos podremos vivir mejor.
Gracias Jesús.
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