Hoy te quería hablar del cuidado de la naturaleza, de respetarla y de intentar cuidarla lo mejor que podamos.
Seguramente habrás visto alguna vez imágenes de un desastre natural, por ejemplo un ciclón. Como sabemos, estos ciclones son imposibles de predecir. Saber cuándo van a ser y cuándo se van a producir a veces es incontrolable. Es como si la madre tierra aguantara el enfado por maltratarla durante meses y luego soltara toda su fuerza. Hemos visto que la naturaleza puede ser también muy destructiva, pero no por ello, debemos abandonar nuestra intención de cuidarla lo mejor posible, aunque a veces de vez en cuando parezca que se enfada y nos dé auténtico miedo.
Cuidado y respeto es lo que hoy te animo a tener con nuestra hermana naturaleza; cuidarla lo mejor posible y respetar su fuerza.
¿Cómo respetamos a la madre naturaleza?
ORACIÓN
Señor, ven delante de nosotros, para guiarnos;
ven detrás de nosotros, para impulsarnos;
ven debajo de nosotros para levantarnos;
ven sobre nosotros, para bendecirnos.
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