¡Buenos días!
Cuando perdemos a un ser querido, duele mucho, se pasa muy mal. Lo que nos duele y entristece, es pensar que esa persona dejará de estar a nuestro lado, que no podremos hablar con ella ni disfrutar de buenos momentos juntos. Esa ausencia deja un profundo hueco en nuestras vidas. Muchas veces evitamos mostrar nuestros sentimientos, ser fuertes y hacernos los duros, pero llorar está bien. Exteriorizar nuestros sentimientos nos ayuda a expresar la tristeza y lamentar la pérdida de nuestros seres queridos.
Pero, como cuando nos caemos o nos hacemos una herida, el dolor que es muy fuerte al principio, irá menguando con el tiempo. Al igual que las heridas tardan un tiempo en curarse pero terminan cerrando, el dolor de la pérdida también irá cediendo cada día. Pero que ese dolor vaya a menos no significa que los estemos olvidando o que hayamos dejado de echarlos en falta.
Recordar a las personas fallecidas es una forma de mantenerlas vivas en nuestro corazón y en nuestro recuerdo. Las fotos o vídeos nos ayudan a hacerlo, recordando momentos especiales con esas personas. Además, no debemos olvidar que siempre estarán con nosotros, ayudándonos en nuestro día a día.
En la película de Coco, vemos lo que tenemos que hacer. Hay que recordar a los que ya no están, disfrutar de sus recuerdos y sentir que no se han ido del todo, que siguen a nuestro lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario